También nos platicaron que ibas a llegar a una comunidad que por lo general eras bienvenido, eras el maestro del pueblo, a veces la hacías , de líder político, de enfermero, de doctor, de psicólogo, de juez, de sacerdote, de proveedor de cualquier necesidad, pero también habría ocasiones que la gente no te aceptaría, por muchas razones, desde que piensan que corrieron al anterior por tu culpa, hasta que simplemente no aceptan desconocidos, o alguien estudiado con planes de desarrollo para la comunidad.
De instructor comunitario, el objetivo básico es enseñar a leer y escribir a los niños y jóvenes, al terminar el año de servicio te darían la beca a cualquiera de las instituciones que ellos tenían registrada en su convenio.
Durante los cursos era recurrente que te decían te puede tocar un lugar donde no hay cuarto para dormir, no hay luz, no hay agua, no hay baños, esta lleno de mosquitos, alimañas y otros animales, tienes que caminar para llegar, a veces cruzar ríos , subir montañas, con mucho calor o con mucho frío, sin cobijas, en fin las condiciones más adversas.
Si así es en Nuevo León, que pienso que no hay tanta pobreza, me imaginaba que en otros estados era muy muy complicado.
Ya estaba en las últimas del curso, ya había entregado mi papelería, ya estaba preparado para ser el maestro, estaban por sortear o designar los lugares que nos enviarían para ya viajar pero...
... Conseguí otro trabajo con el cual podía pagarme la universidad y deje esa etapa de mi vida que por cierto no me acordaba , es más era un secreto, nadie sabía, ni a mi esposa le había platicado de esa época que los cursos eran el la Escuela Industrial Álvaro Obregón por Félix U. Gómez y Madero en contra esquina de Famsa. Bueno toda esa historia era como un secreto , pero ahora ya lo saben pude haber sido el Instructor comunitario de no se dónde, y así como esa historia creo que tengo docenas más...
Nota: gracias por leerme , favor de ver las otras entradas de mi blog .
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