miércoles, 28 de agosto de 2013

Día del Abuelo

En este día de los abuelos, primeramente me auto felicitó porque ya soy abuelo, y como no recordar a los míos,
 Mi Abuelo materno, un señor con un negocio de fabricación y mantenimiento de cocinas, me toco su ultimo día, recuerdo que estaba descansando y que se levanto abruptamente a pedirle a mi abuelita un alka- seltzer , se sentía mal minutos después llego la ambulancia y se lo llevo, también lo recuerdo siempre con el bigote bien delgadito, peinado con suficiente vaselina siempre. 
Mi abuelo Paterno, no lo conocí pero, me platico mi abuelita que era el músico principal del Real de Catorce, y que decían que lo habían embrujado por eso murió, ella años después confeso que no fue un hechizo que fue por beber alcohol en exceso.
 Luego tuve mi abuelo José con el cual recuerdo, que fue plomero, panadero, atendía una tienda en su casa, siempre tenía tiempo para jugar conmigo juegos de mesa, como damas chinas, domino, damas inglesa, ajedrez, baraja , en fin otros juegos nunca le gane, pero aprendí a jugarlos, una vez me platico que de joven le toco estar en la  época de la recesión de los Estados Unidos, una de las crisis económicas más fuertes y que algunos días tuvieron que comer de la basura, yo me imaginaba algunas escenas en blanco y negro, eso me impacto mucho.
 Mi abuela materna, fue cocinera de unos ricos árabes, creo que los dueños de la Manchester (camisas) por eso preparaba cualquier cantidad de alimentos de alta calidad, los me yo mas recuerdo que eran mis favoritos, son el pastel de carne, el macarrón con queso, la milanesa empanizada, las tortas de papa con queso en medio, el arroz, los frijolitos, bistec en salsa, arroz con leche, gelatinas caseras con fruta adentro, pastel también casero, todo lo de cuaresma,  entre otros platillos. Yo una vez le pregunte que si había vivido o sabido algo de La Revolución Mexicana y si recuerdo que me platico que si que la gente hablaba en las calles, en la iglesia, en la plaza de un movimiento que le llamaban la bola y si le toco de lejos ver un grupo de personas que estuvieron en ese movimiento histórico. También le pregunte como aprendió a leer y me dijo que había personas tirando volantes (papeles con publicidad), de un espectáculo (cine, carpa u otro), y que ella no sabía que decían esos papeles con letras, e investigo y así reconoció la letra “A”  aprendiendo a leer, en esos volantes publicitarios, también recuerdo que siempre nos llevaba al cine, ella llevaba comida,  palomitas (hechas de maíz a la antigua en una cacerola), refresco ese de botella clásica de 355 ml, hasta un destapador llevaba, lo único que nos compraba era un chocolate marca Toblerone que era como forma triangular.
 Mi abuela Materna ,  mi segunda madre lo que más recuerdo es su bondad, para con toda la gente, de conducta intachable, siempre dispuesta ayudar y dar de comer a todos, su especialidad las Tortillas de Harina (eran unas gordas increíbles en sabor), ella me cuido por años, también le pregunte que donde estudio la primaria y me platico que un Colegio muy bonito por la calle Washington , el Excelsior, con madres, también le pregunte de la Revolución, me dijo que no tan cerca pero si se sabía, le pregunte que desde cuando existía el shampoo para el cabello, y me dijo que antes no había esos productos,  por otro lado en la cocina siempre me tenía un pan escondido en la alacena, no precisamente para mí, pero siempre me lo daba para comer después de la comida , merienda o cena.
 Tantas historias que hay con mis abuelos, tantas fiestas, tantas reuniones, tantas tardes, tantas comidas.
 Por otro lado ya de joven recuerdo que tuve la fortuna de participar bailando para los adultos mayores de varios municipios, y en asilos, pero la anécdota que más recuerdo, es en un asilo de ancianos en Francia, fuimos a bailar sacaron a todos los viejos al patio, después de nuestra actuación yo veía a una señora blanca muy grande de edad de frente y me acerque a saludarla, no dijo nada, solo me dio una pequeña nota que había escrito en francés con anticipación, no habría manera que lo hubiera hecho en el lugar casi no se podía mover,  de modo paciente espero la oportunidad para dármela, y si yo no me hubiera acercado tal vez esa nota se hubiera ido simplemente a la basura, al yo acercarme a saludarla pudo darme esa nota que decía más o menos así  “ gracias por  venir hijo , nos dieron mucha alegría  en estos últimos días de nuestras vidas”…

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